La industria editorial está viviendo momentos de cambio al igual que otros muchos sectores, con el objetivo de adaptarse a la transformación digital. Ésta ha colocado al consumidor en el centro de su modelo de negocio y se encuentra adaptándose a los nuevos elementos clave de este proceso. A continuación, vamos a ver en qué posición se encuentra el «mundo del libro».
La transformación digital es un proceso que se está produciendo en todos los sectores, algunos son más propensos a introducir nuevas formas de trabajar y otros son más resistentes a las innovaciones que llegan desde fuera, pero la conclusión es siempre la misma: la transformación digital es necesaria para mantener la competitividad de cualquier empresa en estos momentos.
Esta transformación dentro del mundo editorial ha traído consigo también un cambio de la visión del negocio, centrándose no en el producto en sí, sino en el lector y en el consumidor y sus necesidades. Este nuevo planteamiento está extraído del informe “Industry Leaders’ Perspectives on the Digital Transformation Journey in Publishing”, presentado en la Feria del Libro de Frankfurt.
Para realizar ese estudio, se entrevistó a 25 figuras importantes de la industria editorial a nivel internacional para averiguar cuáles eran los objetivos, los obstáculos y las soluciones en este viaje que el sector está viviendo.
Estado de la transformación digital en la industria editorial.
El principal motivador de la transformación digital está propulsado por las demandas del consumidor (41%) y, detrás de esto, la búsqueda de nuevas vías de ingreso (26%) y la creación de nuevos productos y servicios (22%). Entre los entrevistados, tienen una opinión unánime de que la digitalización es crítica para el crecimiento del negocio, aunque se están encontrando con varias frustraciones en el camino.
El estudio se centra en analizar qué importancia están teniendo cinco elementos claves de la transformación digital: almacenamiento de contenido, metadatos, agilidad del contenido (en relación a su capacidad de reutilización), descubrimiento y colaboración. El proceso que se está siguiendo en la industria es apostar por alguno de estos, pero no en todos de forma conjunta.
Uno de los puntos más importantes de la transformación digital es que debe hacerse como un proceso agregado, en el que todas las partes participan y deben estar integradas en la forma de trabajar de cada empresa.
La mayor prioridad ahora mismo son los metadatos (4.6 sobre 5), aunque también es la disciplina en la que hay una mayor brecha de conocimiento (2 sobre 5). La apuesta por los metadatos continuará en los próximos tres años, ya que el 90% de los encuestados aseguraron que seguirán realizando inversiones estratégicas en este campo.
El descubrimiento (discoverability es el término anglosajón, que se refiere a la capacidad de los contenidos para ser descubiertos) es el segundo elemento preferido como elemento transformador (4.5 sobre 5).
En el último lugar encontramos la cultura organizacional, que algunos califican como “fragmentada”, “inconsistente” y “limitada” y termina obstaculizando la colaboración entre los trabajadores. Consideran que los correos electrónicos y las hojas de Excel son herramientas suficientes para compartir documentos en el entorno laboral.
Entre los mayores desafíos que se encuentran los directivos a la hora de abarcar la transformación digital se encuentran la falta de estándares consistentes, la actualización de los archivos, la necesidad de un liderazgo para conseguir el cambio cultural y la búsqueda de gente con las habilidades necesarias.
La omnicanalidad dentro de la transformación digital.
Como parte de este proceso de cambio y adaptación que supone la transformación digital, apareció un nuevo término: la omnicanalidad. El consumo de libros antes era únicamente a través del objeto físico. Sin embargo, con el paso del tiempo y la evolución de la tecnología, se han creado multitud de medios a través de los cuales se puede consumir un libro (web, tablet, app…).
El año pasado, la Unión de Editoriales Universitarias Españolas (UNE) y la editorial CSIC nos invitaron a las VII Jornadas Digitales para hablar de los retos que suponía trabajar en el entorno digital. La mesa redonda en la que participó nuestro CEO, Juan Prieto, tenía como eje de discusión principal la “eficiencia omnicanal”.
Desde Ximdex hemos trabajado en un componente tecnológico (XBUK) que busca sacar partido a este contexto tecnológico. Se trata de un editor visual, al estilo Canvas, que permite generar libros enriquecidos y exportarlos en diferentes formatos, como app, EPUB o como web multimedia.
Su principal ventaja es la facilidad de uso, gracias a su editor tipo Canvas, que permite que cualquier usuario, ya sea principiante o experto, desarrolle ebooks complejos. El usuario puede trabajar con capas en las que introducir diferentes elementos, como texto, imágenes o botones, y con los que maquetar su propio libro digital, que después será convertido al formato que más le convenga.
Esta solución no sólo está pensada para las empresas editoriales, sino también para otros grupos que trabajan con este tipo de productos como los medios de comunicación de masas o agencias de comunicación.
En definitiva, la industria editorial debe afrontar los retos que plantea la transformación digital, que finalmente se transformará en beneficios tanto para las empresas involucradas como para los consumidores finales, que recordemos que se ha convertido en el eje central del sector y el principal motor de cambio.